sábado, 17 de diciembre de 2011

Novio Nº 1

Creo que para entender por qué quiero estar sola, tengo que hacer un recuento de mi historia dentro del mundo novieril.

Si me remonto a mi primer novio, ya puedo decir que fui jodida de adolescente.

Criada en colegio de monjas, no tuve contacto con varoncitos hasta que cumplí los 12 años. Timida, anteojuda, inocente al mango, con aparatos (lo que se dice un monstruito con todas las letras), me resultaba complicado hablar con el sexo opuesto.

Hete aqui que la sorpresa no fue menor cuando a los 14 años (ya con lentes de contacto y los dientes deerechos, pero igual de tímida), en una matinee a las que acostumbraba a ir y siempre era la que se quedaba sola en la parte de los lentos, me saca a bailar el chico más lindo del boliche. Todas mis amigas muertas de amor por el, más lindas que yo, ya desarrolladas (yo era una tabla por donde me mires) y mucho más simpáticas, no pudieron conquistarlo. Yo solamente iba a bailar y como era tan tímida, realmente bailaba y nada más. Y ni me animaba a mirarlo porque me parecía que no valía la pena el esfuerzo y la humillación.

Sin embargo, le gusté. Según él (tipico de futuro hombre histérico) lo atrajo que yo ni lo miraba ni le andaba atrás. Lindo, simpático, bueno, caballero...bueno, dentro de lo que se puede ser con sus 16 años.

Salimos durante 2 meses, hasta que un dia me dijo que me iba a venir a buscar al colegio y después me avisó que no venia porque la mamá no lo habia dejado porque estaba por llover. Y qué hice yo? Dando mis primeros pasos de mina que no aguanta nada fui y le conté a mi mamá que lo había dejado porque "yo no voy a soportar a un nene de mamá que hace lo que la mamita le pide, es un dominado".

Yo tenía 14 y el tenía 16. Claramente desde ese momento tendría que haberme dado cuenta que salir conmigo no iba a ser tarea fácil para ningún hombre en el planeta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Descargate vos también